viernes, 24 de febrero de 2012

Tarta Jovellanos

Una tarta que se hizo popular por una confitería de Gijón, es muy fácil de hacer y sobre todo es muy cómoda cuando hay que llevar una tarta a algún sitio porque es fácil de transportar, normalmente la cubro con papel celofán transparente y le pongo un buen lazo arriba.



Para la pasta brisa: (también se pude comprar hecha, se llama también masa quebrada)
100 gr. Harina
50 gr. Mantequilla
30 gr. Azúcar glass
1 Huevo
Sal

Para el relleno:

50 gr. Avellanas
50 gr. Nueces
100 gr. Dados de manzana
30 gr. Miel
10gr. Azúcar
5 gr. Canela

Para el bizcocho:

100 gr. Almendra molida
100 gr. azúcar
40 gr. Mantequilla
40 gr. Leche
40 gr. Harina
2 Huevos

Glassa:

75 gr. Azúcar glas (aprox., depende de como la queráis de espesa y de la cantidad que queráis hacer)
Un poco de agua

Elaboración:

Esta receta tiene tres partes bien diferenciadas. Por un lado haremos una pasta brisa para forrar el molde, mejor que sea demoldable. Con la harina haremos un volcán, hueco en el centro, en el que comenzaremos a introducir el resto de los ingredientes, es decir, la mantequilla, el azúcar glass, el huevo y una pizca de sal. Mezclaremos con cuidado éstos, de dentro hacia fuera, y luego con la harina, pero sin manosearla en exceso. Esta pasta resultante, la estiraremos y la colocaremos como base.

El segundo paso consiste en machacar levemente con un rodillo los frutos secos, partiendolo con un rodillo, lo metemos en un bolsa y le vamos dando golpes. Ahora cogeremos una manzana, que le va a dar un toque muy particular a la tarta. Tras pelarla y descorazonarla, la cortamos en dados de un centímetro, que mezclaremos con las avellanas, las nueces, la miel, el azúcar y la canela. El resultado lo esparciremos en el molde sobre la pasta brisa.

La tercera parte de la receta consiste en hacer una especie de bizcocho, en el que hay que incorporar al azúcar y las almendras picadas, la mantequilla, la leche, el huevo y a continuación, la harina.

Tan solo nos queda verter esa amalgama sobre el molde, e introducirlo en el horno a 180º durante 30 minutos. Una vez pasado ese tiempo desmoldamos y glaseamos al gusto.

Para la glasa yo pongo el azúcar glas en un vaso y voy añadiendo cucharaditas de agua hasta ver que tiene la consistencia que quiero, pero es muy muy poquita agua, luego con una brocha de silicona se baña la tarta.

También lo he preparado en tartitas individuales, siguiendo el mismo proceso en moldes de silicona para magdalenas.









2 comentarios:

  1. ¡¡Qué buena que tiene que estar!!

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    1. Anímate a prepararla, Inés. Es muy sencilla de hacer y está buenísima, la he hecho muchísimas veces porque no dejan de pedírmela. Si compras la masa quebrada hecha y ya estirada, es un momento preparar el resto de la tarta. Un abrazo.

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